Boadilla celebra las fiestas de San Babilés

Laura Carretero

Boadilla del Monte celebra a su patrón, San Babilés. A partir de las 19:00 horas de hoy la plaza de la Cruz se convertirá en un escenario y los vecinos disfrutarán de las actuaciones de la Escuela de Danza Pilar Domínguez, el baile de los mayores y los talleres municipales de danza.

Los niños también podrán divertirse, sobre todo, desde mañana y hasta el lunes, con castillos hinchables, cuentacuentos, títeres, e incluso una disco móvil infantil en el parque Víctimas del Terrorismo y la plaza de la Cruz.

Durante el domingo se celebrará el XV Maratón Fotográfico para adultos, actuará la Orquesta, se cocinará la gran paella popular y se visitará el Cerro de San Babilés. Este día también cobrará protagonismo el auténtico artífice de estas fiestas. La Hermandad de San Babilés sacará en procesión al Santo a las 10:30 horas hacia el Polideportivo Municipal donde se celebrará una misa. Más tarde, se entregarán las placas, reconocimientos y medallas a los nuevos hermanos. La jornada continuará con una gran paella popular y la actuación del grupo Ara de Boadilla; y hacía las 19:30 horas la imagen de San Babilés regresará a la iglesia de San Cristóbal.

Al día siguiente, lunes 20 de mayo, se realizará una visita guiada al Cerro de San Babilés, con salida desde el Ferial de Boadilla.   

Debido a la inestabilidad meteorológica y la previsión de lluvias, algunas de estas actividades podrían suspenderse si no se dan las condiciones adecuadas para su celebración.

Un Santo de leyenda

La existencia San Babilés no está clara. Para muchos expertos con este nombre sólo existió San Babilés de Antioquía, quien murió en el siglo III a manos del emperador romano Decio. Sin embargo, varias leyendas hablan de un San Babilés, obispo de Pamplona, en el siglo IX. Según estos relatos cuando la capital del reino de Navarra cayó en poder de los moros,  al ver la destrucción de su iglesia y el furor con que perseguían a todos los sacerdotes el santo decidió retirarse a Toledo, ciudad en la que los moros permitían a los cristianos mozárabes el ejercicio y la práctica libre de la religión.

San Babilés vivió un tiempo en la Ciudad Imperial, desde donde se trasladó a la villa de Odón, actual Villaviciosa de Odón, con dos hermanos. Allí eligió como residencia una ermita no muy lejana a la actual Boadilla del Monte. La penitencia y la oración ocupaban sus días y noches.

Su fama se extendió pronto por toda la comarca. Las gentes, atraidas por su vida, su gran cultura y su carácter ermitaño, acudían a pedirle consejos y bendiciones. Muchos vecinos cristiano-mozárabes le enviaban a sus hijos para que les instruyera.

Una situación que provocó la violenta reacción de los almorávides, quienes mataron a San Babilés, a sus dos hermanos y a 80 niños cristianos que se encontraban con el Santo. Tal masacre ocurrió el 30 de octubre del año 815.