Arrancan las obras del nuevo centro deportivo y cultural de La Marazuela

El nuevo centro deportivo y cultural de La Marazuelan está más cerca de ser una realidad. El Ayuntamiento de Las Rozas ha comenzado las obras. Se ha vallado el perímetro y se están realizando los movimientos de tierra necesarios para empezar a construir.

No hay fecha concreta sobre la finalización de los trabajos, pero sí una estimación de lo que puede durar y será algo más de un año. Después habrá que acondicionar y equipar el interior.

Según estas previsiones, en 2023, los vecinos de La Marazuela podrán disfrutar de este gran complejo que será algo más que un centro deportivo. 

“Estamos muy ilusionados con el comienzo de estos trabajos y convencidos de que el resultado final será magnífico. Ahora solo queda pedir a los vecinos de la zona paciencia y comprensión hasta la finalización de las obras, que esperamos que les ocasionen las menores molestias posibles”, ha señalado el concejal de Infraestructuras del Ayuntamiento de Las Rozas, José Cabrera.

Deporte y cultura en un solo espacio, moderno, accesible y sostenible.

El campo de hockey hierba municipal es la estrella de este proyecto. Contará con gradas, vestuarios y el resto de equipamientos necesarios.

Junto a él, se construirán cuatro edificios de tres alturas, en los que habrá tres piscinas, una zona fitness, con sala de cardio y musculación y clases dirigidas, un gran pabellón deportivo para la práctica y el desarrollo de competiciones de diversas modalidades, como baloncesto, fútbol sala o volleyball y anexo, un edificio, también en tres alturas, dedicado al desarrollo de diferentes actividades del área de Cultura, fundamentalmente formativas.

El proyecto contempla un 54,7% de espacios abiertos, de los cuales un 25% estarán ocupados por superficies vegetales. En ellos se elegirán especies vegetales de bajo consumo hídrico y mantenimiento, con riego por goteo y sistemas de recuperación de agua.

Todo el complejo será plenamente accesible para personas con discapacidad.

Parte de la zona disponible se destinará a aparcamiento, con 209 plazas en superficie y 10 de ellas habilitadas además con cargadores para vehículos eléctricos. A ellos se suma una dársena para varios autobuses que permitirá agilizar el tráfico de personas, así como puntos de aparcamiento para bicicletas.